Su último blooper alcanzó el ridículo. Tenía al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, a su lado que acababa de entregarle un enorme ramo de flores y ella preguntaba adonde estaba el gobernador en el estadio Orfeo. Cobró 200 mil pesos para una actividad por el Día de la Mujer, la vacua actividad fue organizada por la esposa de Schiaretti, Alejandra Vigo. En algunas cabezas está la idea de que Susana Gímenez puede tramitir un mensaje trascendente para la perspectiva de género.
Papelón para el gobernador y condescendencia para la senil diva que ha perdido reflejos mínimos, así como le festejan la burrada del dinosaurio vivo también sus vanidades de mujer mayor aterrorizada por la vejez que es implacable a pesar de las cirugías, las cremas y el diente de ajo en ayunas. Photoshopeada a mas no poder, oculta tras la máscara su verdadero rostro después de todo no es de las artistas que la haya pasado mal durante el terrorismo de estado. Ni fue censurada menos aún prohibida, las películas pasatistas la tenían de protagonista y no tenía porque reparar en los varios de la colonia artística que no tenían lugar en la penumbra del proceso.
Entre Miami y Punta, presentaciones millonarias para decir nada y encima pifiarla, que problema puede tener esta mujer mayor aparte del terror a la vejez que la arrincona ?
Pide aplicar la Ley del Talión. El que mata tiene que morir. El que evade ... que?
Comodisíma y relajada lucía entrevistando al ex presidente Menem, en los tiempos del neoliberalismo feroz que arrojaba a millones de personas a la exclusión y ella apoyaba exhultante.
Una fortuna incalculable para la ex socia del cura pedófilo con el que se peleó por los dividendos de los concursos producidos por el "Corcho" Rodríguez y Galimberti que vive trastornada por los piquetes en las calles. Ve el mismo piquete 52 veces y supone que son 52 piquetes.
El país que las divas decadentes sintonizan está en otra frecuencia. El mismo producto repetido hasta el hartazgo aburre. Aburre el almuerzo de 2 horas para ver la misma escena como los 52 piquetes que ve la diva trastornada.
Papelón para el gobernador y condescendencia para la senil diva que ha perdido reflejos mínimos, así como le festejan la burrada del dinosaurio vivo también sus vanidades de mujer mayor aterrorizada por la vejez que es implacable a pesar de las cirugías, las cremas y el diente de ajo en ayunas. Photoshopeada a mas no poder, oculta tras la máscara su verdadero rostro después de todo no es de las artistas que la haya pasado mal durante el terrorismo de estado. Ni fue censurada menos aún prohibida, las películas pasatistas la tenían de protagonista y no tenía porque reparar en los varios de la colonia artística que no tenían lugar en la penumbra del proceso.
Entre Miami y Punta, presentaciones millonarias para decir nada y encima pifiarla, que problema puede tener esta mujer mayor aparte del terror a la vejez que la arrincona ?
Pide aplicar la Ley del Talión. El que mata tiene que morir. El que evade ... que?
Comodisíma y relajada lucía entrevistando al ex presidente Menem, en los tiempos del neoliberalismo feroz que arrojaba a millones de personas a la exclusión y ella apoyaba exhultante.
Una fortuna incalculable para la ex socia del cura pedófilo con el que se peleó por los dividendos de los concursos producidos por el "Corcho" Rodríguez y Galimberti que vive trastornada por los piquetes en las calles. Ve el mismo piquete 52 veces y supone que son 52 piquetes.
El país que las divas decadentes sintonizan está en otra frecuencia. El mismo producto repetido hasta el hartazgo aburre. Aburre el almuerzo de 2 horas para ver la misma escena como los 52 piquetes que ve la diva trastornada.
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