Cuando el cuerpo pasa a ser un territorio en la batalla como la que parece venir sobre la salud de Nestor Kirchner remite a esa constante y detestable forma de hacer política sin ideas por parte de los sectores de la derecha. El compañero le pone el cuerpo y así debe ser porque es la carnadura de un proyecto sostenido con convicciones e ideas. Toda conducción ejercida de cara a la sociedad y desde la propuesta movilizadora de tomar el mayor contacto posible, eludiendo el mediatismo agobiante que es la contrafigura de la acción, implica el sacrificio personal. Nos es la primera vez que los cuerpos son parte de la manipulación politica del "otro" poder en la vida argentina. El cuerpo de Evita la padeció brutalmente. Y miles de cuerpos fueron sometidos al tormento y a la desaparición por el terrorismo de estado. Los paralelismos no son capciosos. Son hechos incontrastables ocurridos. Y es la batalla que asoma.
Sin dramatismos, con realismo puro; un stent es una vía para mejorar la circulación sanguínea.
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