jueves, 24 de octubre de 2013

CÓRDOBA, EL INVITADO INESPERADO

El intento es vano, como una mancha venenosa se extiende el rumor sobre el narcoescándalo. La sociedad interpela y no tiene respuestas coherentes. El ex gobernador y actual primer candidato del oficialismo, Juan Schiaretti propone la ley de derribo, en un desesperado intento de cambiar el eje pero resulta que el piloto de la Gobernación, Marcelo Hugo Samiento está procesado por fuga de información a los narcos, a quienes les facilitaba las coordenadas para el aterrizaje.
La ex diputada Liliana Juncos se ha tornado en un dolor de cabeza para Unión por Córdoba, siempre corriendo por los márgenes del peronismo de la seccional quinta, donde los barrios Maldonado, Renacimiento, Miralta, Colonia Lola, Bajada San José, Villa Boedo, entre otros,  se han convertido desde hace tiempo en los principales antros de cocinas y tráfico de drogas. Ella y sus hijos aparecen como el nexo inevitable entre la política y las drogas, algo que desde hace mucho tiempo corría como un secreto a voces.
Hay un ambiente pesado, un clima denso apocas horas de las elecciones parlamentarias del 27 O. El silencio – que a veces habla más que los sonidos – va atravesando como un rayo el tejido social. Hay hastío. Cansancio. Un agotamiento que se percibe en el aire. Faltan fuerzas, sobra impotencia.
Desde que el tema se instaló a través del programa ADN, que fue visto y repetido por todos, una suerte de parálisis afectó al oficialismo que comenzó a desandar un camino imprevisto sin luz al final del túnel.
Los candidatos tratan de sostener un perfil bajo y repetir las consignas de la PASO. Maltrato de la Nación, discriminación, recursos propios y etcéteras pero algo ha cambiado abruptamente. Las PASO igualmente dibujaron un escenario que no dejó a nadie contento. Ni al oficialismo con el 29%, ni al radicalismo con el 22%, ni al FPV con el 10%, ni al Olguismo con el 6% y menos al juecismo que arañó un mísero 3%. Sólo la izquierda troskista con un 5% y el PRO con el 11% festejaron pírricamente. Ahora nadie arriesga nada. No hay encuestas que digan algo, al menos las que se conocen que no son muchas y si puedan coincidir todas en que el gran campo de batalla es la Capital donde vota el 40% del padrón. El misterio está en el macrocefálico departamento y en la onda expansiva del temblor hacia el Gran Córdoba.

Una suerte de blindaje mediático para el control de daños es la respuesta política, 800 millones de pesos en gasto de publicidad del presupuesto provincial apuntalan la iniciativa que desborda mientras las horas se suceden y la ola de rumores crece. 

1 comentario:

  1. Veo dos veredas. Por una camina UPC, UCR y el PRO, por la otra camina el FPV. Sobre la izquierda y el juecismo no digo nada porque no mueven el amperímetro. Si se da la lógica, Carolina aumentaría al menos un 50%. pero por esta misma razón, el narcotráfico, la gente favorecería tambien a Baldacci, ya que con su estúpido discurso de los valores que le inculcaron sus padres, pega lindo en una sociedad conservadora que tiene tirria al Kirchnerismo.

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